La vicepresidenta de la Reserva Federal de EE. UU., Michelle Bowman, pide permiso para que los empleados del banco central tengan pequeñas cantidades de criptomonedas
El vicepresidente de supervisión de la Reserva Federal de EE. UU. aboga por la propiedad de criptomonedas por parte de los empleados del banco central Michelle Bowman, vicepresidenta de supervisión de la Reserva Federal de EE. UU., se ha pronunciado a favor de permitir que los empleados del banco central posean cantidades "de minimus" de criptomonedas. Esta declaración podría dar un impulso significativo al debate sobre cómo las instituciones financieras manejan las monedas digitales y el marco regulatorio asociado. La propuesta de Bowman llega en un momento en el que el interés por las criptomonedas está aumentando en todo el mundo y muchas instituciones se enfrentan a la cuestión de cómo manejar este nuevo tipo de activo. El término “de minimus” se refiere a cantidades...

La vicepresidenta de la Reserva Federal de EE. UU., Michelle Bowman, pide permiso para que los empleados del banco central tengan pequeñas cantidades de criptomonedas
El vicepresidente de supervisión de la Reserva Federal de EE. UU. aboga por la propiedad de criptomonedas por parte de los empleados del banco central
Michelle Bowman, vicepresidenta de supervisión de la Reserva Federal, ha abogado por permitir que los empleados del banco central tengan cantidades "mínimas" de criptomonedas. Esta declaración podría dar un impulso significativo al debate sobre cómo las instituciones financieras manejan las monedas digitales y el marco regulatorio asociado.
La propuesta de Bowman llega en un momento en el que el interés por las criptomonedas está aumentando en todo el mundo y muchas instituciones se enfrentan a la cuestión de cómo manejar este nuevo tipo de activo. El término “de minimus” se refiere a montos que se consideran tan pequeños que generalmente no tienen un impacto significativo en la situación financiera de la persona o institución en cuestión.
Permitir que los empleados del banco central posean pequeñas cantidades de criptomonedas podría, en primer lugar, promover la aceptación de las monedas digitales dentro del sistema financiero tradicional y, en segundo lugar, ayudar a los empleados del banco central a desarrollar una mejor comprensión de la funcionalidad y los riesgos de las criptomonedas.
En general, esta posición de Michelle Bowman podría sentar un precedente para otros bancos centrales y allanar el camino para un diálogo más abierto sobre las monedas digitales en el sector público. Sin embargo, las propuestas surgen en el contexto de una consideración continua de los riesgos potenciales asociados con la volatilidad y las cuestiones legales de las criptomonedas.
Queda por ver cómo responderán los reguladores financieros a este impulso y qué impacto podría tener en la futura regulación de las criptomonedas en todo el sistema financiero.